Estudiantes protestan contra la nueva política de vivienda
Traducido por Desiree Osornio
El 8 de febrero, los estudiantes organizaron una protesta enfrente del Student Activities Center contra la nueva política de alojamiento. La política establece que ya no se ofrecerá alojamiento en el campus a los estudiantes que regresen, sino que se reservará para los estudiantes de primer año. Los estudiantes que regresen y deseen seguir recibiendo alojamiento en el campus serán alojados temporalmente fuera del campus en el Super 8, el Motel 6 o el Comfort Inn.
La manifestación comenzó a las 11 de la mañana y los estudiantes se reunieron en torno a un micrófono y un altavoz. En el balcón del SAC, los estudiantes pegaron carteles que decían “Cal Poly Homeless” y “No quiero quedarme sin hogar.” Los oradores estudiantiles compartieron historias de su vida en los dormitorios, sus propias experiencias personales con las personas sin techo y lo que podría venir si la nueva política de vivienda sigue en este curso.
“Mis compañeros y yo estamos intentando encontrar algún tipo de alojamiento que nos permita pagar la renta,” dijo Peter Castillo, estudiante de primer año. “Lo cual es una pesadilla en sí mismo porque la crisis de la vivienda aquí arriba es absolutamente una locura y no hay muchas opciones… No quiero volver a vivir en un hotel.”
Los estudiantes criticaron al presidente Tom Jackson Jr. en la toma de decisiones y en el campus aparecieron pintadas con tiza en las que se leía “La educación por encima del beneficio”, entre otras afirmaciones despectivas sobre el presidente de Cal Poly Humboldt. El presidente provocó el alboroto de los estudiantes por lo mucho que se le paga y por el hecho de que Cal Poly Humboldt ha informado de que casi 46% de los estudiantes tienen una seguridad alimentaria baja o muy baja según un estudio de 2018. El salario del presidente Jackson es de $396,150 dólares, y $50,000 adicionales para el alojamiento según Cal State Executive Compensation Summary de agosto 2022.
“Quiero que reconozca la magnitud de estas decisiones que no afectan, por ejemplo, su vida diaria”, dijo Castillo. “Él toma la decisión final y se va a su casa todos los días con una cama y unos ingresos mientras que más de dos mil estudiantes están desplazados en busco de nuevo alojamiento y es injusto.”
En el paro también estuvieron presentes miembros del profesorado, que expresaron su opinión sobre la actual crisis de vivienda en CPH y sobre cómo debería proceder la escuela de forma realista para proporcionar alojamiento a los estudiantes desplazados en el campus.
“…Hay que dar alternativas a los estudiantes”, dijo Marisol Ruiz, que trabaja para la California Faculty Association at the School of Education de CPH.. “¿Dónde está la vivienda justa? ¿Dónde está la vivienda asequible para nuestros estudiantes? He estado aquí desde 2013 y la vivienda siempre ha sido un problema. Vivienda asequible.”
CPH alcanzó una cantidad histórica de matriculación en 2015, con 8,790 alumnos, algo que ha revelado como está de intenso la crisis de vivienda en la escuela.. Durante el curso 2015-2016, la universidad contrató a Brailsford & Dunlavey Inc. para que realizara una cartera de viviendas, en la que descubrieron que las viviendas de CPH estaban “envejecidas” y estaban “acumulando un mantenimiento diferido significativo a medida que envejecen y tienen una necesidad objetiva de inversión.”
“¿Dónde está la vivienda asequible?” dijo Ruiz. “Asequible’ significa como $500 al mes. Algo que sea realmente asequible y realista. Si los estudiantes ganan $20 la hora, aún así necesitan tener comida suficiente para alimentarse.”
Los estudiantes que han atendido la universidad antes de que se convirtiera en Cal Poly también estaban furioso con la nueva política de vivienda por la aflicción de que pudieran sufrir inseguridad en la vivienda a causa de ella. Aparte de la inseguridad en la vivienda, los estudiantes de grupos minoritarios del campus también tienen que preocuparse por la discriminación en la vivienda a la hora de buscar un nuevo lugar donde vivir.
La vivienda en el campus, para mí, no va a ocurrir porque hay caseros racistas en la ciudad,” dijo Barbara Singleton, estudiante de último curso de CPH, “sólo pienso que quizá sea un estudiante menos para ellos en [Cal Poly] Humboldt”. Es triste decirlo, pero ¿dónde voy a vivir?.”
Según la información sobre alojamiento del sitio web de CPH, el Super 8, el Motel 6 y el Comfort Inn combinados sólo tienen aproximadamente 347 camas en total para los estudiantes que vengan a vivir allí. Una declaración de la universidad dirigida a los estudiantes que viven actualmente en el campus afirmaba: “tenemos previsto añadir aproximadamente 1,000 camas para garantizar que los estudiantes actuales dispongan de opciones de alojamiento seguras y económicas administradas por la universidad.”
Los estudiantes ya han estado viviendo en el Comfort Inn durante el termo escolar 2022-2023, donde se les proporciona cena todos los domingos, y además un servicio de transporte para llevarlos y traerlos del campus. Vivir en el Comfort Inn viene con servicio de limpieza dos veces por semana, una mininevera y un microondas para cada habitación y un desayuno continental gratuito todas las mañanas.
“Sinceramente, no es lo peor… la comida de las mañanas no es la mejor alimentación para un estudiante universitario”, dijo Alex Smith, estudiante de último curso de CPH, “pero es comida gratis, supongo, si realmente la necesitas en un apuro… No tenemos una cocina de verdad con la que cocinar, así que sólo vivimos de un microondas y nos limitamos a ir a restaurantes de comida rápida o al supermercado local.”
Los estudiantes que viven en el Comfort Inn tienen acceso a un estacionamiento limitado en las instalaciones o, si no tienen vehículo, hay un servicio de transporte o una parada de autobús cercana que sale cada 31 minutos en punto.
“Cuando me mudé [el semestre pasado], no había mucha gente utilizando el sistema de lanzaderas y estaba bien,” dijo Smith. “Pero ahora que la gente lo utiliza de verdad, he tenido algunos amigos a los que les han dicho que el autobús está ahí mismo y que viene cada media hora, así que sí, ha sido bastante sorprendente.”
